Por: Abraham Mercado (@abrahahahaham).
Vivimos en tiempos donde se está haciendo música por todos lados y a toda hora, pero las grandes estrellas mantienen casi siempre toda nuestra atención y nos es difícil voltear a otras direcciones. Vale la pena desviarse tantito y ver qué otros sonidos se están generando.
Esta vez, nuestro ojo (o más bien dicho oído) está puesto en Glass Animals. Una agrupación de Oxford, conformada por Dave Bayley, Drew MacFarlane, Edmund Irwin, y Joe Seaward, que debuta con ZABA (2014), su primer álbum de estudio, después de un E.P. que pasó muy desapercibido al inicio de su incipiente carrera en 2012.
En ZABA nos muestran algo que ya hemos venido escuchando con bandas como MGMT, Tim & Jean o Capital Cities, pero renovados. Glass Animals agrega un estilo ambiental a su música, logrando canciones bastante agradables y una que otra muy nostálgica; con rastrojos de hip-hop o de ambient, los británicos recuerdan un poco a la música new age como Era o Enigma, pero no tan épico. Recuerdan a Soosh y a Nosaj Thing, pero más rítmicos. En fin, es necesario escucharlos.
Aunque el disco tiene un hilo muy distintivo, las canciones son bastante variadas. «Black Mambo», por ejemplo, destaca por sonidos llenos de ecos y ritmos lentos que dan esa sensación triste que uno busca en la tarde. Tienen, sin embargo, otras más alegres y tropicales, como «Pools». Ambos fueron ya lanzados como sencillos durante 2013 y 2014, respectivamente.
Perfectos para escuchar una tarde lluviosa, o una noche solitaria, para estar dibujando, escucharse con audífonos, con volumen bajo o a todo volumen, son para toda ocasión. ZABA de Glass Animals, algo nuevo para distraerse un rato.
